Considerado el espacio verde del centro boirense, este parque ‘elevado’ es un remanso de naturaleza y tranquilidad. Unas 40 especies de árboles autóctonos gallegos entre los que destacan pinos, tejos o camelias, conforman un hermoso bosque para el deleite de visitantes, que encontrarán también aquí la Casa de la Cultura, la Fonte do Arco da Bella y otros recursos etnográficos, además de un parque infantil. Durante las fiestas de Boiro, la primera semana de julio, se reúnen aquí las ‘peñas’ en una intensa jornada de juegos y competiciones. El lugar es también habitual para la celebración de fiestas, conciertos y romerías.